América Latina y el Caribe generan en conjunto tan sólo el 5% de las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) anuales a nivel global. Sin embargo, los efectos del cambio climático son sumamente costosos para la región, por lo que existe una enorme necesidad de implementar medidas que permitan modificar las tendencias actuales de degradación del medio ambiente y los riesgos asociados a este. En este sentido, y considerando la importancia de desarrollar una economía baja en carbono, México ha expresado importantes compromisos en materia de cambio climático y ha desarrollado numerosas acciones en mitigación y adaptación. Como ejemplo, en 2012, el Congreso de la Unión aprobó la Ley General de Cambio Climático, estableciendo las metas aspiracionales de reducción de emisiones del país, a saber: un 30% para 2020 de acuerdo a la línea base de emisiones y de 50% para 2050 respecto a las emisiones del 2000. Dichos objetivos se reafirmaron en las Contribuciónes Nacionalmente Determimadas (CNDs) presentadas para el Acuerdo de París en 2015 y en la última Conferencia de Katowice sobre Cambio Climático celebrada en diciembre de 2018. No obstante, a pesar de que México ha avanzado en la elaboración de sus instrumentos de planeación en materia de cambio climático, aún enfrenta enormes retos en la implementación de los mismos. En este sentido, para que México logre cumplir con sus CNDs, es necesario que el sector privado trabajé de la mano del sector público y participe en los esfuerzos que el país se ha planteado. MÉXICO2, la primera plataforma de mercados ambientales del país, desarrolla dos iniciativas en el área de medio ambiente que buscan apoyar al sector público y privado a adoptar acciones encaminadas a cumplir con las metas de reducción y mitigación establecidas:
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